El anticristo y el falso profeta
La principal arma de Satanás es el engaño y la mentira. Su poder radica en convencer a los cristianos de que las enseñanzas de Cristo ya no son válidas en nuestros tiempos, tal como lo hizo con Eva. Millones de cristianos son engañados creyendo que están siguiendo a Dios cuando en realidad siguen a Satanás sin saberlo.
La abominación desoladora
Muchos enseñan que la abominación es un idolo que será instalado en el recien inaugurado «tercer templo de Jerusalén» y otros enseñan que la abominación desoladora fué el ejército romano quien destruyó el templo de Jerusalén en el año 70 d.C.